Cada año encabezo esta parashá del libro de Shemot y la próxima, con una especie de excusa, de pedido de disculpas por tener que encontrarle significados y enseñanzas a pasajes de la Torá tan crueles desde la perspectiva humanista con la que solemos leer el texto. Parashat Vaerá va a introducir las plagas, las primeras
Comenzamos un nuevo libro, aquel que cuenta una historia que tanto nos representa, que tanto difundimos a través de nuestra celebración de Pésaj: Egipto, la esclavitud, la liberación y el camino hacia la promesa. Moshé, Aharón, trabajo esclavo, dolor, rebeldía… son palabras que nos acompañan como judíos desde niños. Hoy vuelvo a abrir el libro
El primer libro de la Torá termina. Estamos leyendo la última parashá de un libro de comienzos… de Bereshit. La última de un sinfín de historias personales, familiares. Coyunturas, riesgos, abandonos, amores, secretos. La última que en realidad será la primera historia del libro que viene. Y todo se encadena y da la vuelta para volver
Esta parashá llega con nuestro último aliento de haber recorrido las peripecias de un grupo de hermanos que no terminan de encontrarse. Y nos pasa con la lectura de la Torá como en nuestra vida; en algún lado recóndito de nuestro corazón, necesitamos encontrarnos con nuestros hermanos, aunque a veces nuestras argumentaciones racionales digan lo
Las carestías son múltiples y diversas. Nuestro tiempo está atravesando la mayor carestía de sueños que la historia humana haya conocido nunca. La carestía de sueños que produce este capitalismo individualista y solitario es una forma muy grave de pobreza. Cuando nos privamos de los sueños terminamos por no percibir siquiera su ausencia. Nos acostumbramos
El libro de Bereshit no nos da respiro. Cuando creíamos que lo habíamos leído todo: un hermano que mata a otro, un padre que echa a un hijo y que estuvo a punto de sacrificar a otro hijo, un hijo y una esposa que engañan a un padre, una torre que quiso llegar al cielo