«El Libro de los Libros» exhibe dos mil años de textos

Por primera vez, casi 200 de los más raros manuscritos y textos bíblicos son exhibidos en el Museo de Tierras Bíblicas en Jerusalém, hasta octubre de 2014.
La Exhibición de “El Libro de los Libros” incluye fragmentos originales de la Septuaginta, la Vulgata, la Biblia de Gutenberg y la Genizah de El Cairo, junto con manuscritos iluminados medievales, rollos de Torá y otras reliquias bíblicas. Al final, hay una réplica de la prensa de Gutenberg del siglo XV que revolucionó la disponibilidad de las Escrituras.

El Libro de los Libros, cartel“La exhibición es sobre  la Biblia como libro, no acerca de Teología”, dice el director Dr. Filip Vukosavovic. “Cubrimos más de 2000 años de existencia de la Biblia como objeto físico, y cómo se desarrolló cronológica, geográfica y lingüísticamente a través del mundo desde Israel, donde tanto la Biblia hebrea como el Nuevo Testamento se originaron”.
Desde la apertura  (octubre, 2013),  la muestra atrajo  a tantos visitantes que sus seis meses de exposición se extendieron.  Una de las razones de su popularidad es que el “Libro de Libros” no solo es un objeto colocado bajo un vidrio. Usando iPads ,  instalados en toda la exhibición, los espectadores pueden “abrir” los incalculables trabajos, ampliar y navegar a través de las ilustraciones  de todas las páginas, y cliquear en las viñetas para aprender más información adicional. Hay disponibles audioguías en español, portugués, italiano, hebreo, inglés, árabe, ruso, alemán y holandés.
Vukosavovic muestra cómo la tecnología de luz infrarroja permite a los visitantes descubrir, a través del iPad, capas escondidas de texto borrado en las páginas del Codex Climaci Rescriptus. Algunas de las escrituras inscriptas en el siglo VI en griego y en arameo  “fueron reutilizados” por escribas siríacos del siglo IX para una traducción de textos griegos por John Climacus, un abad del siglo VII.
Cada objeto del “Libro de los Libros” es original además de los facsímiles de fragmentos de los Rollos del Mar Muerto y el Khabouris Codex del siglo XI.
Evidencia bíblica temprana

La exhibición surgió de la Green Collection, unas 40.000 antigüedades bíblicas acumuladas en los últimos cuatro años por la Familia Green de Oklahoma. Los Green,  cristianos, planean instalarlos en un futuro Museo de la Biblia en Washington, DC. Actualmente, una exhibición itinerante está entrecruzando el mundo, con Jerusalém y el Vaticano como dos significativas paradas.
Museo Tierras de la Biblia
De acuerdo con la Directora del Museo de las Tierras Bíblicas, Amanda Weiss, “El Libro de los Libros” llevó casi dos años de trabajo por parte de académicos en Jerusalém y la ciudad de Oklahoma, “con la visión de crear una amplia exhibición sobre el desarrollo de la Biblia, su canonización y diseminación a través de los siglos. La sensibilidad para presentar una representación respetuosa de la Biblia como fuente tanto para el judaísmo como el cristianismo, fue el objetivo principal desde el comienzo”.

“Se acercaron a nosotros porque querían una exhibición en Israel”, dice Vukosavovic, nativo de Montenegro, con un doctorado en Asiriología de la Universidad de Jerusalém. “A pesar del hecho que estamos en la tierra bíblica, nunca hubo, antes aquí,  una exhibición de este tipo”.

“El Libro de los Libros “comienza con objetos que datan del periodo del Segundo Templo, desde el siglo III AEC hasta el siglo I de la EC. “Esta es la era desde la cual tenemos las evidencias físicas más tempranas de la Biblia”, dice Vukosavovic. “No nos interiorizamos de cuándo fue escrita y por quién. Ese no es el punto de esta muestra”.

Páginas de papiros de la Septuaginta, desde el Siglo III hasta el siglo IV , en Egipto, traen a la luz la leyenda talmúdica que la primera traducción del canon griego al hebreo fue ordenada por  Ptomomeo II y llevada a cabo por 70 o 72 sabios que trabajaron, de manera separada, durante 70 días y que, sin embargo, produjeron exactamente la misma traducción.

Vukosavovic destaca que mientras esta es solo una leyenda, “muestra la importancia de traducir el trabajo al griego porque, en esa época, más de un millón de judíos vivían en el exilio en Egipto y no sabían hebreo”.

Deben  haber habido traducciones más tempranas al arameo, pero la  Septuaginta  se convirtió en el Antiguo Testamento para los cristianos y aquí se exhibe por primera vez.

También procedentes de  Egipto hay fragmentos muy tempranos de las escrituras cristianas incluyendo versiones de papiros de gospels que no fueron canonizados con los otros cuatro; y pedazos de los 300.000 documentos judíos escondidos, durante 1000 años en la Genizah de Cairo.

La Biblia se mueve a través de la historia

El piso de la exhibición es un mapa, que lleva a los visitantes de Israel a través de las arenas de Egipto, por Medio Oriente y hacia el sur y occidente de Europa, tal como la Biblia de dispersó por el mundo. Antiguos manuscritos iluminados de Armenia subrayan el hecho que la iglesia armenia fue establecida en 301, 79 años antes que el cristianismo se convirtiese en religión oficial del Imperio Romano.

Vukosavovic destaca que las iglesias – desde las tempranas tradiciones armenias, sirias, griegas, coptas y etíopes-  existen hasta nuestros días en Israel, en su mayoría  en la Ciudad Antigua de Jerusalém.

Dos copias tempranas de Vulgata, desde Italia y Francia, representan algunas de las primeras versiones latinas de todo el canon bíblico entero en un solo volumen.

“Crónicas de la Historia Bíblica”, un tratado en latín del siglo XIV, de cinco metros de largo, de un fraile e inquisidor italiano, usa palabras e imágenes para ligar a Adam con Jesús, y coloca una lista de reyes, emperadores y papas hasta el 1346. El propósito del inusual trabajo, dice Vukosavovic, fue usar la Biblia para apoyar o cuestionar la legitimidad, tanto de los gobernantes seculares como eclesiásticos.

Un Rollo de Esther italiano,  del siglo XVII,  emplea ilustraciones al estilo libro cómico que a veces sugieren comentarios al texto. Vukosavovic destaca que, el villano Haman,  está vestido como turco mientras que todos los demás están en trajes al estilo isabelino. En esos tiempos, el Imperio Otomano suponía una seria amenaza a Europa.

La traducción alemana de Martin Lutero del siglo XVI  y la del Rey James en inglés antiguo del siglo XVII también se encuentran en exhibición junto con biblias políglotas que contienen hasta 9 idiomas en la misma página, de manera que los académicos pueden comparar las traducciones.

También se exhiben dos hojas de la Biblia de Gutenberg de 1450. La Biblia de Gutenberg representa un hito en la historia bíblica.

“Este es real   libro de libros”, dice Vukosavovic. “La Biblia de Gutenberg es el  impreso más caro de la historia. Johannes Gutenberg, artesano alemán, imprimió alrededor de 180 copias, y solo existen actualmente aproximadamente 50”.

Hacia fines del siglo XV, miles de editoriales en Europa imprimían millones de Biblias. “¿Pueden  imaginar el impacto en términos de disponibilidad?  Ya  no tendrán que ir a la sinagoga o a la iglesia para escuchar la Biblia. Podrían leerla en casa”, dice Vukosavovic. “El efecto de Gutenberg es inconmensurable”.  La impresión masiva permitió que la Biblia se convirtiera en la mejor vendida en el mundo y el libro más distribuido. El libro Guiness de los Records estima que aproximadamente se ha impreso unos cinco billones de copias desde el siglo XIX, en 2500 idiomas.

Por Abigail Klein Fuente: Israel 21