Los arqueólogos han descubierto la majestuosa arquitectura del sitio donde vivió Goliat, lo que desvelaría por qué la gente creía que fue construida por seres agigantados
«Cada vez que se realizan excavaciones hay sorpresas», ha señalado el profesor Maeir, investigador principal del Departamento de Arqueología de la Universidad de Bar-Ilán. «Hasta ahora, pensábamos que Gath era la mayor de las ciudades filisteas en los siglos X y IX antes de la era común. Este hallazgo puede indicar que también fue la más grande en el siglo XI».
Los arqueólogos han descubierto normal confundir las fechas del apogeo de la ciudad y han declarado que la ciudad natal de Goliat era un lugar de una grandeza arquitectónica mucho mayor de la Gath del siglo posterior. Esto llevó a la creencia de que la ciudad había sido construida por gigantes.
Para el profesor Aren Maeir, quien dirigió el descubrimiento en Tell es-Safi, los hallazgos ofrecen una manera de dar sentido a los relatos bíblicos de gigantes masivos como Goliat cuando no existe evidencia arqueológica para verificarlos: «No hay esqueletos de personas que son más altas que los pivots de la NBA», ha dicho Maeir a. Esto puede deberse, según el investigador, a la mitificaciónde aquellas sociedades, que habían magnificado los logros del gigante Goliat. A falta de restos humanos que lo acrediten, también puede constituir una explicación, para la existencia de esos gigantes filisteos de los que se habla en las narraciones del Tanaj.
«Gath era la ciudad más grande en la tierra de ese tiempo y parece haber tenido una arquitectura muy impresionante», mantiene el profesor Maeir, que lleva 23 años estudiando el sitio de Tell es-Safi. «Los filisteos eran la cultura dominante en la región, tanto política como militarmente y probablemente culturalmente».
Según la Biblia, el rey Saúl estaba guerreando contra los filisteos, pero todos tenían miedo de uno de estos: el gigante Goliat. Éste desafió a los israelitas a pelear contra él, durante 40 días cada mañana, pero ningún guerrero se atrevía a desafiarle. Hasta que David aceptó la propuesta. Con la honda en mano y la ayuda de Dios, acabó con la vida de Goliat. Un relato que ha perdurado a través del tiempo