Es una costumbre muy extendida en el pueblo de Israel, desde los días de los Gaonitas, el levantarse al amanecer durante los diez días del retorno para recitar Selijot. Lo más importante en esta costumbre es el despertar interior en búsqueda de un camino de retorno y pedir a Hashem perdón, rogarle que se apiade de Su pueblo que se encuentra desterrado en el exilio y sumido en la desgracia; que no mire las malas acciones y que recuerde el pacto que estableció con nuestros ancestros. También pedimos que recuerde la atadura de Itzjak (Akedat Itzjak) y el sacrificio de todos los mártires que murieron consagrando el Nombre Divino. Pedimos por la reunión de las diásporas y por la construcción de nuestro país y de Jerusalém, por la reconstrucción del sagrado Templo y el retorno de la Divina Presencia a Sión. Especialmente se acostumbra a recitar Selijot (pedir perdón) en estos días en que el pueblo de Israel es sometido a juicio, pues las plegarias son mejor escuchadas. Es bueno que cada individuo participe junto al público, y que multiplique sus plegarias por el pueblo de Israel, el reposo de la Divina Presencia y la consagración del Nombre Divino en el mundo. Es justamente en el marco de estos pedidos generales que las plegarias personales serán aceptadas.
Los profetas instaban a los hijos de Israel a unirse en ayuno y oración en días difíciles para pedirle a Hashem que se apiade de Su pueblo y de Su tierra, tal como está escrito (Ioel 2:15-18): «Tocad el Shofar en Sión, proclamad un ayuno, convocad a solemne asamblea, reunid al pueblo, llamad a la congregación, juntad a los ancianos, reunid a los niños y a los que amamantan. Salga el novio de su cámara y la novia de su palio nupcial (jupá). Lloren los sacerdotes entre el pórtico y el altar y digan: «Compadécete oh Eterno, de Tu pueblo y no sea Tu heredad motivo de oprobio para que no se enseñoreen de ella los demás pueblos. ¿Por qué han de decir entre los pueblos: Dónde está el D´s de ellos? Y fue el Eterno celoso de Su tierra y tuvo piedad de Su pueblo».
Conjuntamente con el rezo y el recitado de Selijot es necesario hacer teshuvá y corregir las acciones. Es así que la costumbre en estos días de Elul, es recitar Selijot, estudiar de libros de Musar (ética y moral) y llevar a cabo conferencias públicas de despertar espiritual. Hay quienes acostumbran a dirigir a la comunidad palabras de estímulo al arrepentimiento, previo al inicio del recitado de las Selijot.
Las comunidades sefaradíes y orientales acostumbran a recitar por la madrugada las Selijot (rezos de petición de perdón) a partir del principio del mes de Elul hasta Iom Kipur.
El motivo de esta costumbre se basa en la tradición en que Moshé Rabenu subió al monte de Sinaí para recibir las segundas Tablas de la Ley, el primero de Elul, y oró allí a Dios durante cuarenta días; ó sea todo el mes de Elul y diez de Tishrei, para que perdonara al pueblo de Israel por el pecado de adorar al becerro de oro, y fue el 10 de Tishrei, Iom Kipur, que Dios expió el pecado del pueblo.
Por ello la Torá fijó el día 10 de Tishrei como “Día del Perdón” por siempre; posteriormente algunas adoptaron comunidades la tradición de rezar plegarias especiales de exculpación durante los cuarenta días anteriores a Iom Kipur, para que seamos absueltos de nuestros pecados, como sucedió con nuestros Padres en la época de Moshé Rabenu.
Cabe aclarar que los días de Rosh Jodesh Elul no se dice Selijot, ya que es un día de alegría.
Sin embargo, las comunidades ashkenazies (provenientes de Europa Oriental) acostumbran a recitar las Selijot a partir del domingo anterior a Rosh Hashaná; en el caso que Rosh Hashaná caiga un lunes o martes, se adelantan los rezos de Selijot al domingo de la semana anterior a Rosh Hashaná.
El momento más apropiado para recitar las Selijot, es a partir de la medianoche hasta el amanecer, pero las personas débiles que no pueden recitar las Selijot en la madrugada, deben hacerlo a la mañana ó por la tarde antes de Minjá; ya que a partir de la salida de las estrellas hasta la medianoche no debe hacerse.
La persona que madruga para recitar las Selijot, debe cuidarse de no dormitar en el rezo de shajarit, como dijeron nuestros sabios: “No se debe descuidar lo principal por causa de una costumbre secundaria”. Por consiguiente, quien no puede contener su sueño en el rezo de shajarit, es conveniente que recite las Selijot antes de Minjá ó a la medianoche.
Aquellos estudiantes de Torá que la recitación de las Selijot les provoca cansancio y de esta forma no logran estudiar correctamente, se les aconseja recitar las Selijot a la medianoche, y si no consiguen un minián para ello, por lo menos es recomendable que las reciten los días lunes y jueves. Asimismo, en los “diez días de teshuvá”, deben esforzarse para recitar las Selijot todos los días.
La misma ley recae para los maestros y empleados que la recitación de las Selijot les implique el incumplimiento de sus respectivos trabajos.
La recitación de las Selijot debe efectuarse con temor y reverencia y no se debe apurar en su lectura. En el momento de las Selijot debe cada persona concentrarse en los rezos, arrepentirse por sus faltas y comprometerse a mejorar sus acciones.
Las Selijot pueden recitarse también sin la presencia de un minian (diez personas), con la condición que al pronunciar el versículo “Vaiaabor” piense que está leyendo únicamente, sin la intención de rogarle a Dios, por ser que dicho versículo se considera una plegaria sagrada”, como el “Kadish” y la “Kedusha”, que sólo se recitan en presencia de diez personas.
Las “trece cualidades de Dios”: (Vaiaabor): En la Perashá “Ki Tisa” la Torá nos relata que Moshé goza nuevamente de la “Revelación Divina”, con el objetivo de enseñarle a Moshé una “plegaria” especial, para apelar a la Misericordia de Dios, aún cuando el mérito de los patriarcas se haya extinguido.
“Y dijo (Dios), Yo haré pasar delante de tu rostro todo mi bien, e invocaré mi nombre delante tuyo…” (Shemot 33:19).
Rashí comenta este versículo basándose en el Tratado de Rosh Hashaná, 17 y explica que dicha “Plegaria” se refiere a las “Shalosh Esre Midot” (los Trece Dones Divinos), que cuando Israel los recuerde ante Dios, va a ser escuchado y correspondido, ya que la Piedad de Dios es infinita…
Y éstas son las Trece Cualidades de Dios, conocidas con el nombre de “Vaiaabor”:
1º) “Adonay” – Yo me conduzco con piedad antes que trasgreda el hombre a pesar que sé que finalmente el hombre trasgrederá.
2º) “Adonay” – Yo soy Piadoso luego que el ser humano trasgreda y retorne al buen camino.
3º) “E-l” – También la esencia de esta cualidad es la Misericordia, ya que así versa: “E-li, E-li, ¿por qué me abandonaste?”, y no se replica ante la “Justicia” (otra Cualidad): ¿Por qué me abandonaste?!
4º) “Rajum” – que se Apiada de los pobres y menesterosos.
5º) “Ve Janun” – que Agracia también a los ricos y adinerados.
6º) “Erej Apaim” – Demora en enojarse y en castigar, por si el hombre hace Teshuvá.
7º) “Ve’Rab Jesed” – se conduce con Benevolencia, inclusive con aquellos que no poseen tantos méritos.
8º) “Ve Emet” – Recompensa un buen pago al que hace Su Voluntad.
9º) “Nozer Jesed la’alafim” – multiplica el Jésed (Acción de Bien) que un ser humano hace, para miles, es decir para dos mil generaciones.
10º) “Nose Avon” – carga con las transgresiones que inflinge la persona a propósito y los soporta.
11º) “Va Fesha” – Dios soporta las transgresiones que el hombre realiza para rebelarse contra Él.
12º) “Ve Jatá” – Dios carga con las transgresiones que fueron hechas sin mala intención.
13º) “Ve Naqué” – Perdona a los que se arrepienten.
Por consiguiente, se recita este Versículo en las Selijot varias veces.
Se recita el versículo “Vaiaabor Ad-Nay al Panav Vaikra…” en voz baja y sólo el Jazán eleva su voz. Al comenzar “Ad-Nay Ad-Nay El Rajum…” el público eleva también la voz.
Al decir “Ad-Nay Ad-Nay” se debe inclinar el cuerpo un poco pero no debe levantar los talones como se acostumbra en la Kedushá, al decir “Adonay Adonay”.
Por su parte hay quienes acostumbran inclinarse al decir “Vaiaabor Adonay Al Panav” y se erigen al decir “Vaikra” y nuevamente se inclinan al pronunciar “Adonay”.
De todos modos, lo más importante es comprender lo recitado y concentrarse bien.
Al finalizar las Selijot se recita el “Kadish Titkabal” aunque inmediatamente se comience el rezo de Shajarit.
Lo correcto es pronunciar las “Bircot HaTorá” (las Bendiciones de la Torá) antes de comenzar las Slijot.
Aquellos que madrugan para rezar las Selijot es correcto que se abstengan de comer, aunque todavía no haya amanecido, pero les está permitido beber café ó té, aún con azúcar, incluso habiendo amanecido.