El octavo día en que concluye la festividad de Sucot (en la Diáspora son los días octavo y noveno), no se denomina técnicamente Sucot, sino mas bien Sheminí Atzéret (el Octavo Día de la Asamblea Solemne). Es independiente de Sucot.
Aunque su propósito es poner fin a la festividad de Sucot, y comunmente es considerado como el día (o días) final de Sucot, Sheminí Atzéret no refleja ninguna de las observancias de Sucot relacionadas con esa festividad. Los Sabios describen la razón del octavo día en términos de la siguiente parábola, que se basa en el otro significado del término atzéret. (Atzéret se traduce por asamblea, pero también posee el significado de retención, de detención y esperanza).
Di-s es como un rey que invita a todos sus hijos a una fiesta que dura un número determinado de días; cuando llega el momento de la despedida, les dice: «Hijos míos, tengo un pedido que haceros. Quedaos otro día más; vuestra partida es muy penosa para mi
Al igual que Sucot, Sheminí Atzéret se denomina en el libro de oraciones, zemán simjatenu «fecha de nuestro regocijo».
El Kidush, la oración de gracias después de las comidas y aquellas partes del servicio que se refieren a la festividad por su nombre, no se refieren ya a ella como Sucot, sino como Sheminí Artzéret o Jag Heatzéret.
En Sheminí Atzéret la gente abandona la sucá y retorna a su vivienda permanente para completar allí la semana festiva. Las «cuatro especies» no se utilizan en Sheminí Atzéret.
Debido a que en Sheminí Atzéret se completa el ciclo anual de la lectura semanal de la Torá, se la conoce también como Simját Torá, el Regocijo de la Torá. (En la Diáspora solamente el segundo día de Shemini Atzéret se denomina así, ya que las festividades y ceremonias de conclusión se reservan para ese día.)
Seguramente Simját Torá es el día festivo más alegremente celebrado de todo el año. Está señalado por siete vueltas alrededor de la sinagoga portando todos los rollos de la Torá. Tantos fieles como sea posible tienen la oportunidad de llevar en sus brazos el rollo de la Torá.
Es costumbre proporcionar a los niños banderas especiales o estandartes, y a veces rollos de la Torá en miniatura, para que se unan al baile. Durante el mismo se acostumbra entonar melodías tradicionales o litúrgicas, así como ejecutar animadas danzas de grupo con los rollos de la Torá.
La congregación baila frente a la Torá con una alegría inmensa, orando para que Di-s recuerde el mérito de los «siete pastores fieles», los ushpizín, y para que las súplicas del pueblo atraviesen los siete cielos y asciendan ante el Trono de Gloria. En la mañana, después de Shajarit se sigue la misma costumbre. En varias comunidades sefardíes también se sigue esta práctica en Minjá y Maariv hacia el final del día.
~ Algunos tienen la tradición de colocar una vela encendida — simbolizando la luz de la Torá — dentro del Arca, luego de haber sacado los Rollos de la Torá, para que no quede desprovista de luz.
~ Muchas comunidades acostumbran leer la Torá en la noche de Simjat Torá; éste es el único momento del año en que se lee de la Torá de noche. Respecto a la porción que se debe leer existen diversas prácticas.
~ En la mañana de Simjat Torá, a continuación de Shajarit se lee la última sección de la Torá: Vezot HaBerajá (Deuteronomio 33:1-34:12). Es costumbre que todos los hombres de la congregación sean llamados a recitar la bendición sobre la Torá en este día. Por lo tanto, parte de esta porción se repite varias veces. En algunas comunidades, para evitarla repetición, se lee la Torá en diferentes grupos que se reúnen en recintos separados del edificio sinagoga. La lectura concluye al llamar a tres personas para las aliot exclusivas de este día.
~ Es costumbre llamar a un adulto en representación de todos los niños para leer la anteúltima sección de la sidrá. Esta aliá recibe el nombre de kol hanearím. Todos los niños se paran a su lado y repiten las beralot de la Torá junto con él. Al finalizar, los adultos recitan la plegaria de HaMalaj HaGoél (Génesis 48:16): «Que el ángel que me ha librado de todo mal bendiga a los jóvenes, y que mi nombre y el nombre de mis padres, Avraham e Itzjak, sea proclamado sobre ellos y que ellos se incrementen en abundancia como peces en medio de la tierra».
~ Para la lectura de la última sección de toda la Torá se llama al Rabino o a la persona más distinguida de la congregación, quien recibe el nombre de Jatán Torá [el «novio de la Torá»]. Al terminar de leer las últimas palabras, todos los presentes exclaman en voz alta: Jazák, Jazák, venitjazék — «¡Sé fuerte, sé fuerte, y fortalezcámonos unos a otros!» es la frase tradicional que se dice al finalizar la lectura de cada uno de los Cinco Libros de la Torá.
~ Luego, otra persona, denominada Jatán Bereshit, el «novio de Bereshit», es llamada para la lectura de la primera sección de la Torá, Bereshit (Génesis 1:1 a 2:3).
~ La lectura de la Torá finaliza cuando se llama al Maftir o Jatán Maftir, para quien se lee la sección de Pinjas (Números 29:35 a 30:1) que trata de la ofrenda adicional que se traía en el Gran Templo en este día.
~ Cuando se invita al Jatán Torá y al Jatán Bereshit a subir a la Torá es costumbre hacerlo recitando previamente una hermosa plegaria en su favor.
~ Se acostumbra que el Jatán Torá invite a toda la congregación a un Kidush festivo para celebrar Simjat Torá.