En Shajarit se sigue el mismo ritual y antes de empezar con la lectura de la Torá, se sacan los rollos y se dan siete vueltas alrededor de la bimá. En varias comunidades sefardíes también se sigue esta práctica en el rezo de Minjá y Arbit, hacia el final del día, para que sea un día de completa alegría alrededor de la Torá.
A continuación, se lee la última sección de la Torá: Vezot HaBerajá (Devarím 33:1-34:12). Es costumbre que todos los miembros de la congregación sean llamados a recitar la bendición sobre la Torá en este día. Por lo tanto, parte de esta porción se repite varias veces. En algunas comunidades muy grandes, para evitarla repetición, se lee la Torá en diferentes grupos que se reúnen en recintos separados del edificio sinagoga. La lectura concluye al llamar a tres personas para las aliot “exclusivas” de este día.
Es costumbre llamar a un adulto en representación de todos los niños para leer la penúltima sección de la parashá. Esta aliá recibe el nombre de “kol hanearím” (la voz de los jóvenes). Todos los niños se colocan a su lado y repiten las brajot de la Torá junto con él. Al finalizar, los adultos recitan la plegaria de HaMalaj HaGoél (Bereshit 48:16, en el momento de la bendición de Ya’acob sobre Efraím y Menashé, hijos de Yosef): “Que el ángel que me ha librado de todo mal bendiga a los jóvenes, y que mi nombre y el nombre de mis padres, Abraham e Itzjak, sea proclamado sobre ellos y que ellos se incrementen en abundancia como peces en medio de la tierra”.
Para la lectura de la última sección de toda la Torá se llama al rabino o a la persona más distinguida de la congregación, quien recibe el nombre de Jatán Torá [el “novio de la Torá”]. Al terminar de leer las últimas palabras, todos los presentes exclaman en voz alta: “Jazák, Jazák, venitjazék” ¡Sé fuerte, sé fuerte, y fortalezcámonos unos a otros!, la frase tradicional que se dice al finalizar la lectura de cada uno de los Cinco Libros de la Torá.
Luego, otra persona, denominada Jatán Bereshit, el “novio de Bereshit”, es llamada para la lectura de la primera sección de la Torá, Bereshit (Génesis 1:1 a 2:3).
La lectura de la Torá finaliza cuando se llama al Maftir o Jatán Maftir, para quien se lee la sección de Matot (Bemidvar 29:35 a 30:1) que trata de la ofrenda adicional que se traía en el Gran Templo en este día de Shmini Atzéret.
Cuando se invita al Jatán Torá y al Jatán Bereshit a subir a la Torá es costumbre hacerlo recitando previamente una hermosa plegaria en su favor.
Se acostumbra que el Jatán Torá invite a toda la congregación a un Kidush festivo para celebrar Simjat Torá.
Una Torá que siempre es nueva
¿Por qué comenzamos a leer Bereshit en Simjat Torá?
Los Sabios explican: Reiniciamos la lectura de la Torá el mismo día en que hemos terminado de hacerlo para demostrar que nos es tan preciada como un regalo nuevo, y no corno un dogma antiguo que la persona ya no valora. Es fresca y todos corren a recibirla. Así declara el versículo (Devarím 6:6,): “Y llevarás dentro de tu corazón estas palabras que Yo te ordeno” (Sifrí Vaetjanán).